Dos personas que se proponen entenderse la una a la otra hasta lo

más hondo son como dos espejos frente a frente que se arrojan sin pausa, cada vez desde más lejos, sus propias imágenes, desesperados por ver más, hasta perderse en el horror de una distancia irremediable.

Quizá haya enemigos de mis opiniones, pero yo mismo, si espero un rato, puedo ser también enemigo de mis opiniones.

El deseo es el comienzo de un logro, no una esperanza, pero un fuerte imparable deseo que supera todo.

He trabajado suficientemente duro y he ganado bastante dinero como para fracasar el resto de mi vida. ¡Y voy a hacerlas!

Si soy tu amigo con derecho, mientras te dure la parranda; no te enamoraste de mí, sino de ti cuando estás conmigo.

Por así decirlo, la religión es lo más profundo y tranquilo del mar, que sigue tranquilo por alto que las olas suban.

Cuidados ajenos matan al hombre bueno.

Yo no estoy solo, el resto del mundo está sin mí.

Sólo una persona inepta rinde siempre al máximo de sus posibilidades.

Entra en un contrato conmigo y obtén poder, oh hijo de Marianne, el nuevo rey demonio negro.

Soy el presupuesto de un alma en quiebra, el salir de viaje hacia no sé dónde, en definitiva un cero a la izquierda.