herencia de la humanidad; a menudo hemos tenido que empeñarlos a cambio de la calderilla de lo actual por la centésima parte de su valor. Nos espera a la puerta la crisis económica, y tras ella una sombra, la próxima guerra.
Por la lentitud y el tamaño, era una cucaracha muy vieja. En mi arcaico horror por las cucarachas aprendí a adivinar, aún a la distancia, sus edades y peligros; incluso sin haber encarado nunca realmente a una cucaracha conocía sus procesos de existencia.
La única defensa contra el mundo es un conocimiento perfecto de él.
Cuando te encuentras con alguien, aunque sea muy brevemente, ¿Reconoces su ser prestándole toda tu atención? ¿O le reduces a un medio para un fin, un mero papel o función? ¿Cuál es la calidad de tu relación con la cajera del supermercado, con el empleado del aparcamiento, con el mecánico, con el cliente?
En la bondad se encierran todos los géneros de sabiduría.
Yo he vivido porque he soñado mucho.
Dímelo es el verbo, podemos hacerlo, pon el mundo en mis manos y solo hay que moverlo
Amor no correspondido, tiempo perdido
Superar tus límites te lleva a la excelencia
Y aunque a pares tengo ojos, tengo oídos, sin ti pierden sentido el sonido y el color
Por la lentitud y el tamaño, era una cucaracha muy vieja. En mi arcaico horror por las cucarachas aprendí a adivinar, aún a la distancia, sus edades y peligros; incluso sin haber encarado nunca realmente a una cucaracha conocía sus procesos de existencia.
La única defensa contra el mundo es un conocimiento perfecto de él.
Cuando te encuentras con alguien, aunque sea muy brevemente, ¿Reconoces su ser prestándole toda tu atención? ¿O le reduces a un medio para un fin, un mero papel o función? ¿Cuál es la calidad de tu relación con la cajera del supermercado, con el empleado del aparcamiento, con el mecánico, con el cliente?
En la bondad se encierran todos los géneros de sabiduría.
Yo he vivido porque he soñado mucho.
Dímelo es el verbo, podemos hacerlo, pon el mundo en mis manos y solo hay que moverlo
Amor no correspondido, tiempo perdido
Superar tus límites te lleva a la excelencia
Y aunque a pares tengo ojos, tengo oídos, sin ti pierden sentido el sonido y el color