rostro real (o reflejado en un espejo): un rasgo genético, el pedazo de uno mismo o de un pariente que proviene de un ascendiente (...) La fotografía ofrece un poco de verdad, con la condición de trocear el cuerpo. Pero dicha verdad no es la del individuo, que sigue siendo irreductible; es la del linaje.
Sólo dolerá al principio...
Deja la vida andar, para así unas rimas crear.
Se llena antes el papo que el ojo.
Cuando sea monja te regalaré un higo, dijo un amigo a otro amigo.
La que reluce estre las ollas, no reluce entre las otras.
El primer beso no se da con la boca, sino con la mirada.
Lo más práctico e importante en un hombre es su concepto del universo.
El adversario que llegó a ser una obsesión para ti, ya es una parte de tu propio ser.
La honradez se detiene ante la puerta y llama; el soborno entra
¿Cuándo regresará esa sonrisa que me desnuda en cuerpo y alma?
El lienzo es un campo de batalla interminable.
Sólo dolerá al principio...
Deja la vida andar, para así unas rimas crear.
Se llena antes el papo que el ojo.
Cuando sea monja te regalaré un higo, dijo un amigo a otro amigo.
La que reluce estre las ollas, no reluce entre las otras.
El primer beso no se da con la boca, sino con la mirada.
Lo más práctico e importante en un hombre es su concepto del universo.
El adversario que llegó a ser una obsesión para ti, ya es una parte de tu propio ser.
La honradez se detiene ante la puerta y llama; el soborno entra
¿Cuándo regresará esa sonrisa que me desnuda en cuerpo y alma?
El lienzo es un campo de batalla interminable.