tierra, y descansa en una paz pasajera.
Tras dormitar en la calidez de un sueño, un nuevo día empezará.
Los días seguirán pasando...
Y seguiremos persiguiendo aquella estrella que vimos una vez.
El secreto de la alegría en el trabajo está contenida en una palabra: excelencia. Saber cómo hacer algo así es disfrutarlo.
Dios no es el mar, está en el mar, riela como luna en el agua, o aparece como una blanca vela; en el mar se despierta o se adormece
Aunque se te borre la memoria, aquellos que están en tu corazón, los que viven en tu alma, nunca desaparecerán, da igual lo que ocurra.
La verdad no lleva a la fortuna, ni el pueblo da embajadas, cátedras ni pensiones
Sólo hay una cosa valiosa en el arte: las cosas que no se pueden explicar.
La fuerza no viene de la capacidad corporal, sino de una voluntad férrea.
Es rey quien nada teme, y rey quien nada desea; cada cual puede regalarse con este reino
El alma es la esencia de la vida misma, tal vez esta termine algun día, pero la esencia existirá eternamente.
Somos rehenes de la eternidad, cautivos en el tiempo.
Tras dormitar en la calidez de un sueño, un nuevo día empezará.
Los días seguirán pasando...
Y seguiremos persiguiendo aquella estrella que vimos una vez.
El secreto de la alegría en el trabajo está contenida en una palabra: excelencia. Saber cómo hacer algo así es disfrutarlo.
Dios no es el mar, está en el mar, riela como luna en el agua, o aparece como una blanca vela; en el mar se despierta o se adormece
Aunque se te borre la memoria, aquellos que están en tu corazón, los que viven en tu alma, nunca desaparecerán, da igual lo que ocurra.
La verdad no lleva a la fortuna, ni el pueblo da embajadas, cátedras ni pensiones
Sólo hay una cosa valiosa en el arte: las cosas que no se pueden explicar.
La fuerza no viene de la capacidad corporal, sino de una voluntad férrea.
Es rey quien nada teme, y rey quien nada desea; cada cual puede regalarse con este reino
El alma es la esencia de la vida misma, tal vez esta termine algun día, pero la esencia existirá eternamente.
Somos rehenes de la eternidad, cautivos en el tiempo.