recuerdo. Recuerdo lo geniales que fueron. Tuve una hermosa familia. Nos queríamos y nos ayudábamos y eso es algo que nunca, nunca se olvida.
La desconfianza en nosotros mismos es un enemigo traidor que nos priva de hacer muchas cosas buenas, sin más razón que la de no resolvernos e intentarlas.
Siempre estaba llorando. Siempre aparentando ser fuerte. Encerré mi corazón... en una armadura
Bígamo: Idiota al cuadrado.
El mal ajeno no cura el mio
Coloque en su mente alguien que quiera mezclado entre el público y trabaje para él.
No puede uno ser valiente si le han ocurrido sólo cosas maravillosas.
La desconfianza en nosotros mismos es un enemigo traidor que nos priva de hacer muchas cosas buenas, sin más razón que la de no resolvernos e intentarlas.
Siempre estaba llorando. Siempre aparentando ser fuerte. Encerré mi corazón... en una armadura
Bígamo: Idiota al cuadrado.
El mal ajeno no cura el mio
Coloque en su mente alguien que quiera mezclado entre el público y trabaje para él.
No puede uno ser valiente si le han ocurrido sólo cosas maravillosas.