gobierno que garantice la libertad y el trabajo de todos, criollos y mestizos, indios y libertos; que nos reparta una justicia más equitativa y no se la dé al que mejor la pague. Sobre todo, de la libertad de comerciar con quien querramos añadió el señor de los Ríos y Zúñiga. Basta de trabas e imposiciones.
Siempre me apoyé en figuras geométricas, aparentemente geométricas, pero a diferencia de los pintores geométricos yo lo tomo como punto de partida, como apoyo, y dejo liberado a lo que sí recibo que, repito, es parte del todo, parte de mi interior y parte de mi formación.
Buena demanda o mala demanda, el escribano es mi banda.
La concepción fascista del estado es totalmente incluyente; fuera del mismo no puede existir ningún valor humano o espiritual, mucho menos tener valor. Comprendido esto, el fascismo es totalitario, y el estado fascista - síntesis y unidad que incluye todos los valores - interpreta, desarrolla y potencia toda la vida de un pueblo.
¡En contra de la oscuridad del imperio, las hadas contraatacan!
¡No volveré a ser... la que era antes!
Como lo pensaba, todo era una mentira. No hay nadie adentro.
Puede haber una mujer sin pintalabios, ¡pero no un pintalabios sin mujer!
Creo que hay que ser conscientes de que las personas pueden cometer errores en su vida.
Autoriza a mis ansiosas manos, y déjalas moverse delante, detrás, en medio, arriba, abajo.
Siempre me apoyé en figuras geométricas, aparentemente geométricas, pero a diferencia de los pintores geométricos yo lo tomo como punto de partida, como apoyo, y dejo liberado a lo que sí recibo que, repito, es parte del todo, parte de mi interior y parte de mi formación.
Buena demanda o mala demanda, el escribano es mi banda.
La concepción fascista del estado es totalmente incluyente; fuera del mismo no puede existir ningún valor humano o espiritual, mucho menos tener valor. Comprendido esto, el fascismo es totalitario, y el estado fascista - síntesis y unidad que incluye todos los valores - interpreta, desarrolla y potencia toda la vida de un pueblo.
¡En contra de la oscuridad del imperio, las hadas contraatacan!
¡No volveré a ser... la que era antes!
Como lo pensaba, todo era una mentira. No hay nadie adentro.
Puede haber una mujer sin pintalabios, ¡pero no un pintalabios sin mujer!
Creo que hay que ser conscientes de que las personas pueden cometer errores en su vida.
Autoriza a mis ansiosas manos, y déjalas moverse delante, detrás, en medio, arriba, abajo.