del remo y al perder la bandera de La Concha actúan como si les arrebataran el Árbol de Guernica dan ganas de decirles que remen ellos
Tu peor enemigo no te puede dañar tanto como tus propios pensamientos. Ni tu padre, ni tu madre, ni tu amigo más querido, te pueden ayudar tanto como tu propia mente disciplinada
Veamos de quien es la cabeza que cae primero.
El que no tiene cabeza, para qué quiere montera.
En mediado noviembre, si no has sembrado, no siembres.
Algo paso y no puedes decírmelo, ¿cierto? Eso debería preocuparme.
Tu peor enemigo no te puede dañar tanto como tus propios pensamientos. Ni tu padre, ni tu madre, ni tu amigo más querido, te pueden ayudar tanto como tu propia mente disciplinada
Veamos de quien es la cabeza que cae primero.
El que no tiene cabeza, para qué quiere montera.
En mediado noviembre, si no has sembrado, no siembres.
Algo paso y no puedes decírmelo, ¿cierto? Eso debería preocuparme.